Aprendí.
A no tener miedo.
A que esa pata ya no tiemble.
Aunque hoy, tembló.
Aprendí.
A enfrentarme, si es necesario.
Y aprendí, a no callarme.
Solo me falta aprender ciertas cosas.
Limpiar heridas.
Cerrar los ojos y dejar que la magia suceda.
A doblar a la izquierda.
A no trabar mi boca cuando hablo.
A dejar la intolerancia de lado.
Y los rencores, también.
Aprender.
Es algo que se hace con tiempo.
Y se práctica día a día.
Tras una caída.
Tras una cachetada.
Tras un engaño.
Tras una jugada.
Estas aprendiendo.
Algo.
Nuevo.
Diferente.
Y se presentan esas cuestiones.
Que nos vuelven locos y locas.
No quiero caer allí.
En ese pozo profundo, donde lo único que te ilumina es la oscuridad.
No quiero.
Adiós.
sábado, 22 de diciembre de 2012
viernes, 21 de diciembre de 2012
4 hs
Empieza.
Con calor y con sol.
Radiante y rabioso.
Noche larga.
Oscura.
Rara.
Negra.
Hermosa.
Como la sonrisa, de aquel hombre.
Hermosa.
Como los gatos y los perros.
Y el calor, aplastante.
Nos da la bienvenida.
Y yo le abro la puerta de mi congelador.
Y el derrite todo.
Mi paciencia.
Mi confianza.
Mi seguridad.
Mi autoestima.
Y los puesto, cansados.
Con colores y olor tropical.
Buenos Aires.
Tropical.
Faltan monos.
Aunque, creo que ya hay.
Buenos Aires.
Tropical.
Banana-Kiwi-Ananá.
Adiós.
Con calor y con sol.
Radiante y rabioso.
Noche larga.
Oscura.
Rara.
Negra.
Hermosa.
Como la sonrisa, de aquel hombre.
Hermosa.
Como los gatos y los perros.
Y el calor, aplastante.
Nos da la bienvenida.
Y yo le abro la puerta de mi congelador.
Y el derrite todo.
Mi paciencia.
Mi confianza.
Mi seguridad.
Mi autoestima.
Y los puesto, cansados.
Con colores y olor tropical.
Buenos Aires.
Tropical.
Faltan monos.
Aunque, creo que ya hay.
Buenos Aires.
Tropical.
Banana-Kiwi-Ananá.
Adiós.
lunes, 17 de diciembre de 2012
Uno de hormigas.
Hoy abrí los ojos, tras esa pesadilla.
En esa pesadilla, donde una araña era una lagartija.
Y vi muchas hormigas.
Y me pregunté, ¿Duermen?
¿Soñarán?.
Y luego me imaginé que si.
Que sueñan, comen y respiran.
Y tienen hambre.
Y sienten temor.
Y sienten frío.
Después de una mañana agitada.
Después de pensar, que quería escribir.
Decidí.
Pedalear.
Y pedaleé.
Mucho tiempo.
Y se me salió la cadena.
Y me sentí en un almanaque.
Engrasada.
Mecánicamente sucia.
Tonta.
Desorientada.
Pero recordé una gran lección y lo solucioné.
Y un hombre, decidió hablarme.
Y pedaleamos.
Y yo escapé.
Y las manos me lavé.
Adiós.
lunes, 10 de diciembre de 2012
Breveda a a a ad
Seré breve, pues el tiempo corre.
Seré breve, para no herir sentimientos.
Soy una masa de huesos y músculos.
Rojos y sangrientos.
Blancos y aireados.
Con líquidos y fluidos.
Con células y cartílagos.
Sintetizaré.
Seré breve.
Diré las palabras justas.
No hablaré de más.
Si digo algo más.
Creo que estará mal.
Hay que pensar, cada palabra.
Pensarla.
Y después, viene la reflexión.
O la inflexión.
O la implosión.
No sé cual me gusta más.
3 meses de disfrutar a mi manera.
Con dolor de cabeza.
Jaqueca.
Jaque.
Mate.
Y las ganas de ponerme el delantal.
Y sacar chispas en mi manos.
Para hacer eso.
Y disfrutar.
La brevedad.
Será breve, reducida o tal vez corta.
Adiós.
Seré breve, para no herir sentimientos.
Soy una masa de huesos y músculos.
Rojos y sangrientos.
Blancos y aireados.
Con líquidos y fluidos.
Con células y cartílagos.
Sintetizaré.
Seré breve.
Diré las palabras justas.
No hablaré de más.
Si digo algo más.
Creo que estará mal.
Hay que pensar, cada palabra.
Pensarla.
Y después, viene la reflexión.
O la inflexión.
O la implosión.
No sé cual me gusta más.
3 meses de disfrutar a mi manera.
Con dolor de cabeza.
Jaqueca.
Jaque.
Mate.
Y las ganas de ponerme el delantal.
Y sacar chispas en mi manos.
Para hacer eso.
Y disfrutar.
La brevedad.
Será breve, reducida o tal vez corta.
Adiós.
lunes, 3 de diciembre de 2012
Triste Lunes
Hoy, hoy, si hoy.
Tenía la necesidad básica de saber de ti.
Y el calor, respondió de manera negativa.
Ayer, fue un domingo agradable.
Paz.
Mucha.
Sol.
Agua turbia.
Y algo rico que beber.
Y hoy.
Triste lunes.
Tratando de imaginarme una sonrisa.
Tratando de que caigan esas gotas.
Y el calor que nos sofoca a todos.
Transpirar la gota gorda.
Y respirar.
Mirar ese hermoso atardecer, y sentir que tu cuerpo, se mueve solo.
Mirar ese hermoso atardecer, y llorar.
Llegar a la esquina, y que el colectivo aparezca.
Eso es un milagro.
Llegar a la esquina, y que te contesten.
Eso es un milagro.
Y que el sol, se retire de esa forma tan bella, pone mis pelos de punta.
Ese cielo violeta, naranja y rojo.
Lleno de nubes blancas, que realzan su color.
Necesito bajar mi ansiedad.
En Tres.
Dos.
Uno.
Ahora.
Ya.
En este preciso momento.
Agua y más agua.
Hielo y más hielo.
Y pastillas para calmar las ansias.
Adiós.
Tenía la necesidad básica de saber de ti.
Y el calor, respondió de manera negativa.
Ayer, fue un domingo agradable.
Paz.
Mucha.
Sol.
Agua turbia.
Y algo rico que beber.
Y hoy.
Triste lunes.
Tratando de imaginarme una sonrisa.
Tratando de que caigan esas gotas.
Y el calor que nos sofoca a todos.
Transpirar la gota gorda.
Y respirar.
Mirar ese hermoso atardecer, y sentir que tu cuerpo, se mueve solo.
Mirar ese hermoso atardecer, y llorar.
Llegar a la esquina, y que el colectivo aparezca.
Eso es un milagro.
Llegar a la esquina, y que te contesten.
Eso es un milagro.
Y que el sol, se retire de esa forma tan bella, pone mis pelos de punta.
Ese cielo violeta, naranja y rojo.
Lleno de nubes blancas, que realzan su color.
Necesito bajar mi ansiedad.
En Tres.
Dos.
Uno.
Ahora.
Ya.
En este preciso momento.
Agua y más agua.
Hielo y más hielo.
Y pastillas para calmar las ansias.
Adiós.
sábado, 1 de diciembre de 2012
Baches
Amarillo.
Blanco.
Pileta y agua clara.
Colores y sabores.
Uno que me encanta.
Y me llenó de dudas.
La desgracia.
Me persigue, me busca, me quiere.
Me desea.
Pero, yo trato de esquivarla, y la vuelvo a encontrar.
En una plaza.
En la colectora.
En ese puente.
Es la maldición de él.
Es su maldición.
Que no me deja dormir y no me deja sentir.
Ahora quiero dormir, dormir, por un rato largo.
En esa silla de tres sillas.
Rodeada de libros e historia.
Rodeada de polvo y madera vieja.
Dormiré para olvidar y para evitar pensar.
Adiós.
Blanco.
Pileta y agua clara.
Colores y sabores.
Uno que me encanta.
Y me llenó de dudas.
La desgracia.
Me persigue, me busca, me quiere.
Me desea.
Pero, yo trato de esquivarla, y la vuelvo a encontrar.
En una plaza.
En la colectora.
En ese puente.
Es la maldición de él.
Es su maldición.
Que no me deja dormir y no me deja sentir.
Ahora quiero dormir, dormir, por un rato largo.
En esa silla de tres sillas.
Rodeada de libros e historia.
Rodeada de polvo y madera vieja.
Dormiré para olvidar y para evitar pensar.
Adiós.
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